Todas las bodas son diferentes y únicas, puesto que tanto los novios como sus invitados son también distintas y todos ellos aportan su grano de arena en las bodas, con su estilo, con su simpatía, con su juerga… Gracias a esta variedad de personas, siempre logramos hacer cosas muy diferentes en cada boda.
Y aunque todas estas celebraciones sean diferentes, todas ellas tienen mucho en común, aunque suene un poco raro y contradictorio. Me explico. Siempre se da el que los novios se vistan de novios, lleguen al lugar donde se celebrará la ceremonia, y es aquí donde yo quiero hacer una pausa. Una vez leídos los botos matrimoniales, se sella el acuerdo con las alianzas, sí las alianzas de boda que se ponen el uno al otro, y que a veces juegan una mala pasada como en este caso, que Javi se concentraba para ponerle el anillo a Alba y éste que no quería entrar. Menos mal que se lo han tomado con mucho humor. Será una anécdota más a contar a sus hijos…